La agencia francesa de protección de datos CNIL (Commission nationale de l’informatique et des libertés) ha impuesto dos multas por valor de 100 millones y 35 millones de euros a Google y Amazon respectivamente por no respetar la legislación sobre las cookies. La sanción a Google marca el récord de la mayor multa jamás impuesta por un delito relacionado con la protección de datos.
Curiosamente el anterior récord también lo ostentaba Google con otra multa de 50 millones de euros que también le había impuesto la CNIL en 2019.
La principal razón de las sanciones a Google.fr y Amazon.fr es la práctica de colocar cookies en el ordenador del usuario de Internet «sin su consentimiento previo».
Según se desprende de la sentencia, los banners informativos que se muestran al acceder a estos sitios web no contienen “información lo suficientemente clara para que el internauta sepa para qué se utilizan estas cookies y cómo se utilizan”.
Las elevadas multas se justifican, según la CNIL, por la gravedad de las infracciones al «violar la privacidad de los usuarios de Internet en su vida diaria digital», ya que «permiten que se recopile una gran cantidad de información sobre las personas, sin su consentimiento, para poder servirles posteriormente» publicidad personalizada.
Además, se ha tenido en cuenta el tamaño y volumen de negocio de estas empresas que procesan los datos personales de millones de ciudadanos franceses. Google acapara un 90% del mercado de motores de búsqueda y Amazon el 20% del comercio electrónico en el país galo.
La CNIL reconoce que ambas empresas han tomado medidas desde septiembre para mejorar sus prácticas en materia de cookies. Pero considera que estos esfuerzos han sido insuficientes y que la información sobre las cookies que se brinda a los internautas es insuficiente.
La CNIL le da un plazo de tres meses a ambas empresas para cambiar sus mensajes relacionados con las cookies. En caso de que no lo hagan, se enfrentan a una multa diaria adicional de cien mil euros diarios por cada día que pase sin cumplir.
Tanto Google como Amazon han manifestado su rechazo a las sanciones impuestas.
«Defendemos nuestro historial en términos de transparencia y protección de nuestros usuarios”, ha declarado Google. “La decisión de la CNIL (…) ignora estos esfuerzos y no tiene en cuenta el hecho de que las normas y marcos regulatorios franceses son inciertos y cambiantes. Continuaremos comunicándonos con la CNIL para comprender mejor sus demandas mientras continuamos mejorando nuestros productos y servicios «.
Amazon, por su parte, ha manifestado estar “en desacuerdo con la decisión” y manifiesta que “la protección de los datos personales de nuestros clientes siempre ha sido una prioridad absoluta para Amazon. Siempre actualizamos nuestras prácticas en materia de protección de datos personales para asegurar que respondemos a las necesidades de clientes y reguladores.”