Las autoridades de protección de datos europeas tendrán que aplicar de manera más estricta el Reglamento General de Protección de Datos. Tras recibir una queja del Defensor del Pueblo Europeo, la Comisión ha ordenado a las autoridades nacionales de protección de datos que cada dos meses lleven a cabo revisiones del progreso de sus principales investigaciones sobre las grandes empresas tecnológicas bajo su jurisdicción.

Las revisiones bimensuales deberán incluir información sobre el objeto de las investigaciones, las autoridades que sean parte, y las medidas que se estén llevando a cabo. Hasta el momento las autoridades nacionales no tenían que dar parte de sus investigaciones a la Comisión.

Esta decisión parte de una queja presentada en septiembre de 2021 al Defensor del Pueblo Europeo por parte de la organización irlandesa Irish Council for Civil Liberties en el que se denunciaba que la autoridad irlandesa de protección de datos no estaba haciendo cumplir ni controlando el cumplimiento del RGPD.

La recomendación del Defensor del Pueblo llegó el pasado diciembre y en ella se solicitaba a la Comisión la monitorización del desarrollo de los casos en los que se investiga a las grandes firmas tecnológicas.

Las compañías son reguladas por las autoridades del país en el que tienen su sede principal y eso significa que la mayor parte de estos casos caen bajo la jurisdicción de la autoridad irlandesa que tiene, por tanto, un papel fundamental para la correcta aplicación del RGPD en todo el continente.

Sin embargo, la autoridad irlandesa ha sido el foco de numerosas críticas por su diligencia en la aplicación del RGPD, algo que ha llevado al Tribunal de Justicia de la Unión Europea a autorizar a otras autoridades nacionales a hacer cumplir la ley en casos transfronterizos dentro de la UE aunque la sede principal no se encuentre en su jurisdicción.