Lamentablemente, el ciberacoso se ha convertido en una amenaza prevalente en nuestra era digital. Este tipo de acoso, llevado a cabo a través de dispositivos electrónicos, sobre todo teléfonos móviles, a menudo implica comentarios dañinos o intimidantes y publicaciones públicas creadas con la intención malintencionada de humillar a la víctima. Es un fenómeno que no solo afecta a los adultos, sino que es muy común entre los jóvenes. Como resultado, es crucial entender cómo ayudar a los menores a enfrentarse a este problema generalizado.
La Singularidad del Ciberacoso
Uno de los factores distintivos del ciberacoso es que, a diferencia del acoso tradicional en persona, no termina cuando el acosador está fuera de la vista. Hoy en día, los acosadores pueden perseguir virtualmente a sus víctimas en todas partes a través de la tecnología. Esto implica que el acoso puede ocurrir sin el conocimiento inmediato de la víctima, y debido al amplio alcance de las redes sociales, el acoso puede ser presenciado por una audiencia significativamente más grande que el patio de recreo escolar convencional.
Teniendo en cuenta los desafíos para hacer que un ciberacosador cese su comportamiento dañino, la estrategia más efectiva es educar a sus hijos sobre hábitos seguros en línea para prevenir que tales situaciones ocurran en primer lugar.
Métodos de Ciberacoso
No sólo hay una variedad en los tipos de acosadores a través de la web, sino también muchos tipos de técnicas de ciberacoso que estos utilizan para molestar a sus víctimas. Primero y principal, está el acoso, que implica mensajes ofensivos repetidos enviados a una víctima por un acosador en algún tipo de medio en línea. Estos mensajes pueden ser insultantes, personales e incluso amenazantes.
Luego están los ataques muy dirigidos, llamados Exclusión y Revelación. Con la Exclusión, los ciberacosadores seleccionan a un individuo para aislarlo. La Exclusión es un método popular, con ejemplos por todas partes, desde estudiantes de secundaria hasta celebridades. Con la Revelación, estos acosadores comparten información privada, fotos y videos de una sola persona para humillarlos en línea. También está el ángulo anónimo, también conocido como Enmascaramiento, donde un ciberacosador crea una identidad en línea falsa para menospreciar, acosar y degradar a su víctima.
Consejos de Prevención del Ciberacoso
Los padres deben informar a sus hijos que sus actividades en línea serán monitoreadas utilizando software de control parental. Explicar cómo funciona este software y cómo puede protegerlos es esencial. Esta política debe estar bien establecida antes de que su hijo empiece a usar su primer dispositivo conectado sea un teléfono o un ordenador.
Además, los padres deben discutir el ciberacoso con sus hijos y ayudarles a entender cómo ocurre. Esta discusión debe tener lugar antes de que su hijo obtenga sus dispositivos.
Los controles parentales pueden ser una herramienta útil para supervisar activamente las interacciones en línea de tus hijos, establecer restricciones de tiempo de uso y prevenir la exposición a contenido inapropiado.
El ciberacoso es un problema complejo que evoluciona con los rápidos avances de la tecnología y las plataformas de redes sociales. Por lo tanto, los padres deben mantenerse actualizados sobre las últimas formas de ciberacoso y los ajustes de seguridad más recientes disponibles en varias plataformas.
Condiciones para la Propiedad de Dispositivos
Antes de que los niños obtengan sus propios dispositivos digitales, deben aceptar las instrucciones sobre hábitos inteligentes en línea. Es crucial que entiendan que una vez que algo se publica en línea, permanece allí para siempre.
Además, los niños deben ser precavidos con su información personal. Se les debe aconsejar que no compartan públicamente su número de teléfono móvil y dirección de correo electrónico y que nunca revelen sus contraseñas, incluso a amigos cercanos.
Pensamientos Finales
Si eres víctima de ciberacoso, lo primero que debes hacer es bloquear al acosador. Luego, asegúrate de recopilar pruebas. También puedes usar internet a tu favor y buscar recursos relevantes para ayudarte con tu problema como los que ofrece la Agencia Española de Protección de Datos.
Para los padres, lo más importante es la comunicación. Hazte disponible como recurso y recuérdales a tus hijos que pueden contarte cualquier cosa que esté sucediendo en su mundo en línea.
En conclusión, el ciberacoso es una cuestión apremiante que requiere atención y educación continua. Al enseñar a tus hijos qué es y cómo ocurre, establecer reglas para el uso responsable de dispositivos y mantenerse informado sobre sus actividades en línea, puedes equiparlos mejor para navegar el mundo digital de manera segura. Recuerda, el objetivo final no es controlar las actividades en línea de tu hijo, sino empoderarlos con las herramientas y la comprensión necesarias para protegerse ellos mismos.